domingo, 16 de septiembre de 2012

Silencio

Son aquellas palabras que nunca dije las que ahora explotan dentro de mi pecho. Las que gritan en mi garganta, rogando por la libertad, clavadas en mi interior con espinas de rosa.

Son esas palabras las que imploran, llorando, un espacio en este mundo. Las que claman dejar el no ser, tomar cuerpo y forma. Decorar cada estrella con su brillo. Prenderse en las alas de fuego de la mariposa que se eleva entre toda esta oscuridad.

Mas deben ser acalladas. Aunque cada palabra sufra, aunque cada una sea promesa y ofrenda, sea dolor o llanto, aunque cada palabra se quiebre bajo el peso de la angustia, tiene que permanecer en silencio. Maldito y despiadado silencio que termina con todas las bellas intenciones y hace florecer el brote de la desesperanza.

Sin decir nada, cada sentimiento expira, llevándose consigo un segundo más, un día, un año, tallando en el pecho de este maltrecho lobo una cicatriz imborrable, como tantas otras. Cada palabra, muda, vuela en silencio, de la mano de los más queridos espíritus, cuyos ojos ven más allá de mi mismo, cuyas propias palabras hacen de bálsamo, pero saben permanecer en silencio ante este crimen.

"Yo recapacito y pienso que puedo ofrecerte mucho más, pero tú le entregas tus labios, él calma sus deseos, yo sufro en la agonía del silencio y tu herida no se cura..." En lo más íntimo R.L.

Son aquellas palabras que nunca diré, las que me hacen guardar silencio.




1 comentario:

  1. Parafraseando, maldito y despiadado silencio... que nos regala tan hermosas palabras una vez más, otro segundo, otra hora y otro año...
    Sea, pues.
    Bendito silencio.

    Plzll^^

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