miércoles, 4 de mayo de 2011

Eris

Te odio a ti.

A ti y a todo lo que representas


Te odio por no ser mía.

Por haberte transformado en lo que soy.

Un ser dependiente.

Alguien que te necesita.


Porque ahora no sé vivir solo.

Quiero que me mires,

que me mimes,

que me abraces y me beses.

A mí, sólo a mí.


Me has convertido en un ser egoísta.

En alguien que te busca en todas partes.

Alguien que pone su alma en cada mirada.

En cada batida a ninguna parte.

Para encontrarte,

a ti,

siempre desaparecida.


Alguien que te busca en cada palabra,

en cada mirada distraída,

en cada suspiro y estrella.

En la tempestuosa neblina

de un mañana incierto.


Alguien que no sabe encontrarte…


Por eso te odio,

porque te extraño a mi lado,

y tú…

tú no lo ves.


Porque se desgarra mi corazón

cada vez que veo tu retrato,

porque lloro como un niño

cuando no estás…


Algo en mi ha nacido

y me ha cambiado.

Con tu amor me has matado,

por eso te odio…

por no saber amarte…

No hay comentarios:

Publicar un comentario