lunes, 29 de junio de 2009

Pienso, luego...

Eso mismo pienso, pero luego. El verano es tan.... como decirlo... prometedor que se me duerme el cerebro. Si vale, los que me conocen sabe que nunca anda muy despierto, pero con esta calorcilla de ahora, y ese olor a sal que se respira hasta en el interior de la meseta, ese olor que te deja medio tonto como diciendo "Eh eh eh eh eh eh eh eh eh eh eh (y muchos ehs más"todo eso me deja ahora más tonto que nunca. Con ganas de hacer nada, ni de hacer el vago tengo ganas. No sé porqué será, pero tampoco me voy a molestar en averiguarlo.

Lo dijo Descartes (René des Cartes), cogito ergo sum, que no significa le cogí todo lo suyo, no. Pienso luego existo. Luego sino pienso no existo, y si no existo no puedo ni pensar. Vaya circulo vicioso más tonto. ¿no? Eso es culpa del verano. Que nos volvemos tontos. Pero es tan prometedor... se presenta tan nuevo, tan benéfico, con tantas expectativas que como decirle que no. Me huele a sal sí, pero también a libro nuevo, a ensayos multitudinarios, a horas muertas frente, a horas muertas frente a teles ajenas o en su defecto las pantallas del ordenador, me huele a helados de al lado del parque infantil, me huele cerveza en una terraza, me huele a comuna, me huele mal... no espera eso no... me huele.... a biszcocho de frutas, que nunca lo he hecho pero tiene que oler bien, me huele a matar el tiempo bebiendo vodka caramelo con Diego, me huele a matar el tiempo jugando a la Play con Jesús, me huele a curso de monólogos en la Galatea... me huele a tantas cosas, que entre que tengo el cerebro tonto y la nariz sobresaturada, me entra el bochorno y me despido...

Pasad un buen verano

1 comentario:

  1. La polla, tío! Lo del vodcka caramelo me ha llegado XD. Hay que repetirlo.
    Un saludo, amigo!

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